OPINIÓN
Reclutar empleados no siempre es una tarea
sencilla. Además de demandar tiempo y dedicación, la selección de personal
requiere de la minuciosidad y perseverancia necesarias por parte de la
compañía, para que el proceso sea fructífero y genere un impacto positivo en la
organización.
Contratar al profesional idóneo puede significar
el éxito de la compañía. Por el contrario, reclutar al trabajador equivocado
puede convertirse en un error muy costoso para las empresas. De lo anterior
surge mi opinión personal al momento de efectuar el proceso de seleccionar
futuros empleados.
Se debe tener muy claro el perfil que se busca.
Lo primero que se deberá considerar al momento de contratar empleados, es el
análisis de puesto. “Lo primero es hacer un adecuado levantamiento del perfil,
esto va a garantizar que los currículos que vayan llegando, sean congruentes
con lo que se busca y así se contará con un mayor número de candidatos idóneos.
Además se debe tener presente y no
olvidar que el candidato no sólo debe ajustarse al puesto, sino que también
debe ajustarse a la filosofía de la organización.
Aunado a ello, la propuesta de la empresa es
clave en el proceso de selección. Y esto tiene aspectos explícitos e
implícitos. Los explícitos son lo que la
empresa ofrece en las condiciones de contratación, pero el candidato también
tendrá en cuenta los implícitos, como por ejemplo, si la empresa fomenta la
retención del talento, si respeta el balance entre el trabajo y la vida
personal, si cuenta con políticas de remuneración. Apoyando a lo anterior, el
requerimiento que se publica no debe ser cambiado, ya que esto puede indicar
una falta de seriedad por parte de la empresa, perjudicando su imagen; por
ejemplo, en lo que respecta a salario, prestaciones, entre otros.
En otro inciso, en cuanto al reclutamiento,
la búsqueda de profesionales se puede realizar de manera interna, a través de
comunicados al personal, situación que de manera habitual no se realiza en esta
compañía. Pues según se informó, generalmente el reclutamiento se efectúa de
manera externa, a través de la bolsas de trabajo.
El reclutamiento interno, permitiría mejorar
el clima laboral, tiene un menor costo para la organización y es una motivación
para los trabajadores; mientras que el reclutamiento externo, tiene como
ventaja la incorporación de personas con otras experiencias, aunque el costo y
tiempo invertido es mayor. Por otro lado, si se están realizando varios
procesos en paralelo, y la demanda es grande, como se me dio a conocer, debido
a la gran rotación de personal, se puede considerar derivar el reclutamiento a
una consultora, a fin de ahorrar tiempo.
En cuanto a si se requiere una persona para
ocupar un alto mando gerencial o directivo, lo recomendable, de acuerdo a lo
descrito en la literatura, será utilizar la metodología del “headhunting”, ya
que través de referencias o de contactos, los márgenes de la búsqueda se
acortan.
En cuanto
al personal que labora en el área de reclutamiento y selección de personal,
idealmente, deberá ser personal calificado, con conocimiento y experiencia
dentro del área; tal es el caso de psicólogos con experiencia en área organizacional. Según se me hizo saber, existen empleados que no son
psicólogos, menos especialistas en el ámbito organizacional, y algunos de ellos desconocen los procesos
que se siguen en el ámbito de la atracción de talento; situación en la que la
organización se ve afectada, por no contar con personal que tenga el perfil y
cuya curva de aprendizaje demerita el trabajo de todo el servicio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario